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viernes, marzo 18, 2022
Crédito de la imagen: Dominio público

Warren Harding: El presidente norteamericano que redujera el gasto federal en casi un 50% en tan sólo dos años


En 1921, Estados Unidos estaba en crisis. Warren Harding y el Congreso respondieron reduciendo el gasto federal a la mitad.

He elogiado repetidamente a Ronald Reagan.

También he elogiado a Calvin Coolidge en varias ocasiones.

E incluso una vez resalté las virtudes de Grover Cleveland.

Hoy vamos a celebrar los logros fiscales de Warren Harding.

En particular, como ilustra este gráfico basado en datos de la OMB, presidió un período de notable disciplina en el gasto.

Harding también puso en marcha reducciones muy importantes -y muy efectivas- de los tipos impositivos.

Y su programa de reducción del gobierno y de los tipos de impuestos ayudó a poner fin rápidamente a una enorme recesión económica (a diferencia de las políticas de gran gobierno de Hoover y Roosevelt, que profundizaron y alargaron la Gran Depresión).

En un artículo para el National Review el año pasado, Kyle Smith elogió la gestión económica del presidente Harding.

En un momento de crisis nacional, Warren G. Harding restauró la salud económica de Estados Unidos. …Estados Unidos en 1921 estaba en crisis, tambaleándose por la peor recesión en medio siglo, la espiral deflacionaria más severa de la que se tiene constancia… El desempleo, se estima ahora, se situaba entre el 8.7 y el 11.7 por ciento mientras los soldados que regresaban inflaban el tamaño de la población en edad de trabajar.

Entre 1919 y agosto de 1921 la media del Dow Jones se desplomó un 47%. La respuesta de Harding a esta emergencia fue, en gran medida, dejar que el ciclo se desarrollara. …La recesión terminó a mediados de año y siguieron tiempos de bonanza. Harding y el Congreso redujeron el gasto federal casi a la mitad, del 6.5% del PIB al 3.5%. El tipo impositivo máximo se redujo del 73% al 25%, y la base impositiva se amplió. El desempleo bajó a un estimado de 2 a 4 por ciento. …Harding fue un éxito rotundo en un papel históricamente importante como anti-Wilson: restauró un gobierno limitado, clásicamente liberal y centrado en los derechos, y merece un inmenso crédito por el auge económico que se inició en su primer año y continuó durante el resto de la década de 1920.

El artículo de Smith también elogia a Harding por haber revertido algunas de las políticas más odiosas de Woodrow Wilson, como la discriminación racial y el encarcelamiento de los opositores políticos (Wilson también tenía un terrible historial en materia económica).

Veamos ahora algunos extractos de un nuevo artículo escrito por Vance Ginn, de la Texas Public Policy Foundation, y John Hendrickson, de la Iowans for Tax Relief Foundation.

El presidente Harding asumió el cargo en 1921 cuando la nación sufría una severa depresión económica que se pasaba por alto. El crecimiento se veía obstaculizado por los elevados impuestos sobre la renta y la gran deuda nacional tras la Primera Guerra Mundial.

…La principal política económica del presidente Harding fue frenar el gasto, reducir las tasas impositivas y pagar la deuda. Harding… comprendió que cualquier recorte significativo de los impuestos y la deuda no podía producirse sin reducir el gasto. …Harding no sólo tuvo éxito en este primer intento de reducir los gastos del gobierno, sino que sus esfuerzos resultaron en “más de 1.500 millones de dólares menos que los verdaderos gastos reales para el año 1921”. …La década había comenzado en depresión y en 1923 la economía nacional estaba en auge con un bajo desempleo.

Por cierto, la reducción de más de 1.500 millones de dólares de 1921 a 1922 puede no sonar como mucho, pero fue una reducción del 30 por ciento en el tamaño del gobierno (y esto fue en los días en que el gobierno era una carga relativamente pequeña).

Eso equivaldría a recortar más de 1.5 billones de dólares del presupuesto federal de este año.

Qué gran idea, tal vez incluso mejor que mi otra fantasía libertaria.

P.D. Thomas Sowell elogió las políticas económicas de Harding.

P.D. Y yo aplaudí las políticas económicas de Bill Clinton. O, para ser más precisos, alabé las políticas que se promulgaron durante su presidencia.

Este artículo de Liberty International ha sido publicado con permiso.




  • Daniel J. Mitchell is a Washington-based economist who specializes in fiscal policy, particularly tax reform, international tax competition, and the economic burden of government spending. He also serves on the editorial board of the Cayman Financial Review.